<< STORYTELLING: la conjunción perfecta entre la técnica de narrar una historia y el arte de motivar a tu equipo de trabajo >>
PIENSA DIFERENTE
¿Contar una historia? acaso, ¿en qué puede modificar esto mi flujo de ingresos?
Si mediante este capítulo Ud. pretende aumentar directamente sus resultados solo con contar una historia, lamento informarle que eligió el capítulo incorrecto.
El presente capítulo está dirigido hacia aquellas personas que se sientan realmente líderes en su empresa, y no simples jefes.
Un simple jefe se orienta exclusivamente a imponer autoridad y control valiéndose de su posición jerárquica; un líder, por su parte, busca influir, transmitir, inspirar y guiar a otras personas en miras de un objetivo común. Ahora, ¿cómo se logra esto?
Existen multiplicidad de técnicas, pero una es, para su sorpresa: contar una historia. A la técnica mencionada se la conoce como “storytelling”, pero… ¿contar cualquier historia? Pues NO.
Aquí nos encontramos con la cuestión trascendental: la misma debe cumplir con determinados lineamientos y/o requisitos y, por lo general, apunta a la motivación del individuo.
Como cualquier relato, el mismo debe contar con una introducción, la cual debe ser breve, pero debe permitirle al receptor adentrarse en el tema en cuestión.
Con posterioridad, aparecerá el “nudo” o conflicto, en el cual haremos partícipe al receptor, incluyendo ciertos detalles que le permita conocer más del tema que estamos tratando y del conflicto que se generó. De esta manera, su desarrollo permitirá el surgimiento de ciertas emociones y necesidades de que el conflicto mencionado se superase.
Por último: EL FINAL. Un final glorioso, digno de una estatuilla de Hollywood. Un final que permita al receptor sentirse parte de aquel triunfo.
Pero, ¿esto es todo? NO. Es aquí donde hallamos lo más desafiante para nosotros, relatores, de esta técnica: la extensión del relato no podrá ser inferior a 3, ni superior a 5 minutos. En este último caso, de hacerlo, se perdería la atención y el interés del oyente.
Y…¿para qué sirve esta técnica? un poco lo explicamos en la introducción, pero por si aún tiene dudas, está comprobado que, las personas motivadas, trabajan más a gusto, más eficientemente y, a su vez, esta motivación contagia a los demás individuos del equipo, generando un mejor clima laboral y, por ende, alcanzando indirectamente mejores resultados.
Un gran referente de esta técnica podría ser Steve Jobs, fundador de Macintosh 128K (primer ordenador personal comercializado exitosamente), empresa a la cual renunció luego de ciertos problemas con la cúpula directiva y, posteriormente, fundó a su competencia: APPLE.
Gonzalo Facundo Fernández
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